martes, 24 de junio de 2014

SE VA JUAN CARLOS, LLEGA FELIPE, REYES DE ÚLTIMA GENERACIÓN SE’N VA JOAN CARLES, HI ARRIBA FELIP, REIS D'ÚLTIMA GENERACIÓ



Ya llegó el nuevo Rey, que se llama Felipe VI, justo tres siglos después que su antepasado del mismo nombre y anterior número cardinal provocase una catástrofe, de la cual Catalunya aun arrastra las secuelas y el trauma, aunque va renaciendo como la ave fénix. No diré cual, todo el mundo la conoce, pero provocó devastadoras consecuencias y afrentas que ni el tiempo ha podido borrar. Tendrá difícil Felipe VI arreglar los desaguisados de su padre, que aunque en la mayor parte de su reinado supo mantener un carisma casi inmaculado, al descubrirse ciertos detalles oscuros o sórdidos, su popularidad entró en caída libre, hasta llegar a convertirse en una caricatura de sí mismo.



Felipe VI tiene una virtud en su discreción, en no querer ser el centro de atención, en volcarse en su trabajo. Pero su mayor defecto es ese, que carece del carisma y simpatía de su padre, que siempre era más cercano, como alguien que conoces. Felipe VI es más introvertido, y eso se palpa en sus discursos, en su tono de voz apagado y sin personalidad, casi de robot o de máquinas que te dicen “Su tabaco, gracias”.




Veremos si sabe actuar por sí mismo o será más fácil de manipular, desde los políticos de toda índole que tratarán de manejarlo como quieran. O si tendrá que ser su esposa, la ex periodista Letizia Ortiz, que tendrá que actuar por él cuando se encuentre desbordado, ya que se le ve a ella más aguerrida que a él. No quiero decir que tenga que ser ella la que pronuncie sus discursos de Navidad en vez de él o sea quien se los escriba (ella está mucho más capacitada que él para la pequeña pantalla), pero es su frialdad y su distanciamiento quienes hacen que peligre su contacto con sus súbditos, aunque ahora, en su coronación, aparezca gente que les tenga como dioses.



Hay que darles un margen de confianza, pero igual que muchos ya no creemos en los Reyes Magos por que ya nos dijeron que esos son los papás, tampoco creemos en los Reyes que nos salvarán a todos de cualquier problema, igual que nuestro médico de cabecera no nos salvará de las enfermedades por que nos recete alguna medicina. Ese tipo de soluciones resultan anticuadas, como quien cree que la mejor manera de que una persona sea más “sensata”, debe de casarse ya, el famoso “sentar la cabeza”.



El Matrimonio no arregla tampoco eso, pues hasta la esposa o el marido más entusiasta acaba amargamente decepcionado y optarán por el divorcio o seguir juntos a condición de que cada uno tenga amantes que les alegre su aburrida y mezquina vida. Catalunya ya no cree en los Reyes, cree en los Presidentes de República como los de Francia o Estados Unidos, y ve que Felipe VI no le serviría para nada, por ello quiere buscarse un futuro por sí misma. Y sin amantes como en el Matrimonio.

SE’N VA JOAN CARLES, HI ARRIBA FELIP, REIS D'ÚLTIMA GENERACIÓ



Ja hi ha arribat el nou Rei, que es diu Felip VI, tot just tres segles després que el seu avantpassat del mateix nom i anterior número cardinal provoqués una catàstrofe, de la qual Catalunya encara arrossega les seqüeles i el trauma, encara que va renaixent com l'au fènix. No diré qual, tothom la coneix, però va provocar devastadores conseqüències i ofenses que ni tant sols el temps ha pogut esborrar-ne. Tindrà difícil Felip VI arreglar els disbarats del seu pare, que tot i que a la major part del seu regnat va saber mantenir un carisma gairebé immaculat, en descobrir-se certs detalls foscos o sòrdids, la seva popularitat va entrar en caiguda lliure, fins a arribar a esdevenir una caricatura de si mateix.



Felip VI té una virtut dins la seva discreció, en no voler ser el centre d'atenció, en bolcar-se en la seva feina. Però el seu major defecte és aquest, que no té pas el carisma i simpatia del seu pare, que sempre era més proper, com algú que coneixes. Felip VI és més introvertit, i això es palpa en els seus discursos, en el seu to de veu apagat i sense personalitat, gairebé de robot o de màquines que et diuen "El seu tabac, gràcies".



Veurem si sap actuar per si mateix o serà més fàcil de manipular, des dels polítics de tota mena que miraran de manejar-lo com vulguin. O si haurà de ser la seva dona, l’ex periodista Letizia Ortiz, que haurà d'actuar per ell quan estigui desbordat, ja que se li veu a ella més agosarada que no pas a ell. No vull dir que hi hagi d’ésser ella la que pronunciï els seus discursos de Nadal en comptes d'ell o sigui qui se'ls escrigui (ella està molt més capacitada que ell per la petita pantalla), però és la seva fredor i el seu distanciament que fan que sigui en perill el seu contacte amb els seus súbdits, encara que ara, en la seva coronació, hi aparegui gent que els tingui com déus.



Cal donar-los un marge de confiança, però igual que molts ja no creiem en els Reis Mags perquè ja ens van dir que aquests són els pares, tampoc creiem en els Reis que ens salvaran a tots de qualsevol problema, igual que el nostre metge de capçalera no ens salvarà de les malalties perquè ens recepti d’alguna medicina. Aquest tipus de solucions resulten antiquades, com qui creu que la millor manera que una persona sigui més "sensata", ha de casar-se tot seguit, el famós "posar seny", o “sentar cabeza” en castellà.



El Matrimoni no arregla tampoc això, ja que fins la dona o el marit més entusiasta acaben amargament decebuts i optaran pel divorci o seguir junts a condició que cadascú tingui amants que els alegri la seva avorrida i mesquina vida. Catalunya ja no hi creu gens, en els Reis, hi creu en els Presidents de la República com els de França o els Estats Units, i veu que Felip VI no li serviria per res, per això vol buscar-se un futur per si mateixa. I sense amants, com dins el Matrimoni.

domingo, 1 de junio de 2014

EUROPA, NUESTRO CONTINENTE, AUNQUE ALGUNOS NO QUIERAN EUROPA, EL NOSTRE CONTINENT, TOT I QUE ALGUNS NO VULGUIN



Los resultados de las elecciones para el Parlamento Europeo según los países han sido desalentadores, ya que aunque en varios de ellos se eligieron a diputados de partidos que sí están interesados de verdad en nuestro Continente llamado Europa, la participación en todos esos países ha sido baja, de desinterés casi absoluto por la misma Europa, y siempre desde un punto de vista neocolonialista, es decir, si mi país no manda sobre todos los demás, no me interesa. Esto es lo que han dado a entender los países más poderosos, en algunos de ellos han ganado candidaturas populistas y xenófobas, con una visión del mundo paternalista y de seres superiores, que creíamos ya superados, teniendo en cuenta que varios de esos políticos niegan que hayan ocurrido terribles sucesos como el Holocausto judío. 



Sobre lo que ha pasado en el Estado español, los dos grandes partidos han perdido apoyo, y el nuevo partido Podemos, del profesor universitario Pablo Iglesias, el cual he visto varias veces en el programa La Sexta Noche como contertulio siempre hablando de manera firme y convencida a la audiencia frente a los contertulios conservadores que le acusaban de todo (he ido varias veces al programa como público), ha encarnado de manera coherente lo que la gente de a pie siente desde el 15-M. 



Y sobre lo de la victoria de Esquerra Republicana de Catalunya en Catalunya, ha sido coherente con lo que piensa ahora el pueblo catalán, que no le gusta nada cómo se hacen las cosas en España, mira que siempre se ha ofrecido para arreglar las cosas en el Estado español, pero nunca le han dejado, sólo a condición de que estuviera en un muy segundo plano y sin hacer sombra a la manera de hacer las cosas de Madrid. Oriol Junqueras, el profesor de Historia metido a político, primero eurodiputado y después nombrado líder del partido, está haciendo una gestión impecable en ERC, al contrario que sus antecesores. Sin extravagancias, sin ataques de ego, sin actitudes de tipo raro, vamos, de persona normal como cualquiera de nosotros y de persona culta que ha visto mucho mundo, ha resucitado un partido histórico pero que se había debilitado mucho. Un poco como Pablo Iglesias, que comparte con Junqueras lo de que también ha sido profesor en una importante Universidad. 



Al contrario que el PSC, que da bandazos sin sentido queriendo complacer a todos a la vez, y de Ciutadans y el PPC, más obsesionados en recibir elogios de los canales televisivos ultraconservadores españoles y de sus extremistas contertulios. Pero en el resto de Europa, la cosa no pinta nada bien: la victoria del FN en Francia y del UKIP en Gran Bretaña, aparte de otros fascistas en Dinamarca, muestra la peor cara de nuestro Continente, donde aun hay gente que se resiste a poner a los nazis de Hitler en cualquier sitio que no sea en un altar, y que niega sistemáticamente el Holocausto. 



Bien, el UKIP quiere ir de partido respetable y se niega a estrechar lazos con el FN por aquello de que nunca ha condenado el antisemitismo tajantemente. No sé si lo hace por el típico aire de superioridad británico frente a Francia, pero debe de ser lo único bueno que tiene ese partido. Por cierto, todos esos partidos son ultranacionalistas y xenófobos, pero lo que más me mosquea es su obsesión por conseguir alianzas entre todos ellos, siendo de países diferentes, y por lo tanto, extranjeros. 



Me recuerda a la Santa Alianza que montaban muchas Monarquías absolutas europeas en el siglo XIX, que se defendían unas a otras cuando estaba en peligro un Rey o le imponían un Régimen democrático, e invadían ese país para reponer al Monarca absoluto. O para tener un país donde recibir asilo político si tienen que huir. Pero lo peor es que todos ellos, los Le Pen incluidos, dicen tener como modelos al Iran de los ayatollahs y a Vladimir Putin, aparentemente gentes de otras razas, otras religiones que odian ellos (como la musulmana) o incluso de otras ideologías, aunque la de Putin jamás he sabido cuál es. 



En fin, muchas cosas cabe arreglar en Europa, que es nuestro Continente aunque no queramos, pero el egoísmo o las nostalgias imperiales de cada país lo hace cada vez más difícil.


EUROPA, EL NOSTRE CONTINENT, TOT I QUE ALGUNS NO VULGUIN


Els resultats de les eleccions per al Parlament Europeu segons els països han estat descoratjadors, ja que tot i que en diversos d'ells es van triar diputats de partits que sí que son interessats de debò en el nostre Continent anomenat Europa, la participació en tots aquests països ha sigut baixa, de desinterès quasi absolut per la mateixa Europa, i sempre des d'un punt de vista neocolonialista, és a dir, si el meu país no mana sobre tots els altres, no m'interessa pas. Això és el que han donat a entendre els països més poderosos, en alguns d'ells han guanyat candidatures populistes i xenòfobes, amb una visió del món paternalista i d'éssers superiors, que crèiem ja superats, tenint en compte que diversos d'aquests polítics neguen que hagin ocorregut terribles successos com l'Holocaust jueu. 


Sobre això que ha passat a l'Estat espanyol, els dos grans partits han perdut suport, i el nou partit Podemos, del professor universitari Pablo Iglesias, el qual he vist diverses vegades al programa La Sexta Noche com a tertulià, sempre parlant de manera ferma i convençuda a l'audiència davant els tertulians conservadors que l'acusaven de tot (he anat molt sovint al programa com a públic), ha encarnat de manera coherent allò que la gent del carrer sent des del 15-M. 


I sobre això de la victòria d'Esquerra Republicana de Catalunya a Catalunya, aquesta ha estat coherent amb allò que pensa ara el poble català, que no li agrada gens com es fan les coses a Espanya, mira que sempre s'ha ofert per arreglar les coses en l'Estat espanyol, però mai li han deixat fer-ho, només a condició que estigués en un molt segon pla i sense fer ombra a la manera de fer les coses de Madrid. L’Oriol Junqueras, el professor d'Història ficat a polític, primer de tot eurodiputat i després nomenat líder del partit, està fent una gestió impecable a ERC, al contrari que els seus antecessors. Sense extravagàncies, sense atacs d'ego, sense actituds de paio estrany, diguem-ne, de persona normal com qualsevol de nosaltres i també de persona culta que ha anat per tot arreu, ha ressuscitat un partit històric però que s'havia debilitat de valent. Una mica com Pablo Iglesias, que comparteix amb Junqueras el que també ha sigut professor en una important Universitat. 



Al contrari que el PSC, que fa tombs sense sentit volent complaure tothom alhora, i de Ciutadans i el PPC, més obsessionats en rebre elogis dels canals televisius ultraconservadors espanyols i dels seus extremistes tertulians. Però a la resta d'Europa, la cosa no pinta gens bé: la victòria de l’FN a França i de l’UKIP a Gran Bretanya, a part d'altres feixistes a Dinamarca, mostra la pitjor cara del nostre Continent, on encara hi ha gent que es resisteix a posar als nazis de Hitler a qualsevol lloc que no sigui damunt un altar , i que nega sistemàticament l'Holocaust. 


Bé, l’UKIP en vol anar de partit respectable i es nega a estrènyer llaços amb l’FN per allò que mai no ha condemnat l'antisemitisme rotundament. No sé si ho fa pel típic aire de superioritat britànic enfront de França, però deu ser l'única cosa bona que té aquest partit. Per cert, tots aquests partits són ultranacionalistes i xenòfobs , però el que més m’estranya d’ells és la seva obsessió per aconseguir aliances entre tots ells, sent de països diferents, i per tant, estrangers. 


Em recorda a la Santa Aliança que tenien moltes Monarquies absolutes europees al segle XIX, que es defensaven les unes a les altres quan era en perill un Rei o l’imposaven un règim democràtic, aleshores envaïen aquest país per reposar-hi el Monarca absolut. O per tenir un país on rebre asil polític si han de fugir. Però el pitjor és que tots ells, els Le Pen inclosos, diuen tenir com a models a l’Iran dels aiatol làs i a Vladímir Putin, aparentment gents d'altres races, d’altres religions que s’odien ells (com la musulmana) o fins i tot d'altres ideologies, tot i que la de Putin mai no he sabut qual és. 


En fi, moltes coses cal arreglar a Europa, que és el nostre Continent, tot i que no vulguem, però l'egoisme o les nostàlgies imperials de cada país ho fa cada vegada més difícil .